Sorpresas de la vida.

La mañana del 25 de enero del 2010 no fue como cualquier otra. Me levanté tarde para ir a la secundaria, y mientras desayunaba oía algo bastante raro en la televisión, así que decidí prestarle atención para ver lo que pasaba. Cuando subí el volumen y logré oír la noticia, no lo creía; Salvador Cabañas había recibido un disparo a la cabeza en la madrugada de ese día en un conocido bar de la Ciudad de México. Al escuchar lo dicho, lo primero que hice fue recordar todos los goles y las alegrías que 'Chava' nos dio como jugador dentro y fuera de la cancha, y aunque era casi un hecho que no volvería a jugar fútbol (que afortunadamente esto terminó siendo mentira) lo importante era su vida. Lo que había pasado me parecía increíble, debido a que hace apenas dos días, lo pude ver haciendo lo que siempre amó, en un partido ante Morelia. Y durante días, jugó el partido más importante y que tuvo la dicha de ganar, el duelo entre la vida y la muerte.

3 años, 6 meses y 4 días después volvió a ocurrir. La tecnología ha avanzado a pasos gigantescos, y ahora tengo la costumbre de que cada vez que despierto, checo Twitter, algo que por alguna extraña razón, no hice hoy. Minutos después, la mañana rutinaria de las vacaciones se rompe cuando mi padre me dice: "Chucho" Benítez ha fallecido", en ese momento vuelvo a mi cuarto para confirmar la noticia, y, efectivamente, el delantero ecuatoriano que acababa de hacer campeón al equipo de mis amores, había muerto por un infarto. Fue muy difícil asimilarlo, puesto que todos recordábamos a aquel 'Chucho' que corría por todos los balones y tiraba sin piedad a la portería. En más de alguna vez se la "mentamos" debido a su individualidad futbolística que a veces tornaba a ser egoísmo, sí, pero también lo idolatrábamos con todos los goles que marcó con América y Santos, de prácticamente todas las formas posibles. No importa en qué equipo haya estado, el se ganó el corazón de sus aficionados, convirtiéndolo en un ídolo más, pese a sus desplantes extra-cancha, dentro de ella era el goleador, el ejemplo a seguir. Dicen que de cada 20 extranjeros que vienen a México, uno rinde como debería, y hoy se fue uno de los mejores que ha venido en los últimos tiempos, entregado, luchador, deportista, atleta, y sobre todo, un gran ser humano.

La historia es similar, más no idéntica, Cabañas nos demostró que hasta las batallas más difíciles y duras se pueden ganar, pese a que se tenga mucha pérdida moral, y Benitez nos demostró que en la cancha hay que darlo todo, no solo por tu equipo, sino también por tu familia, tus seres queridos y por el amor al fútbol. Dos tragedias similares acabaron con la carrera de dos de los mejores futbolistas que han venido a México en los últimos 15 años, y desafortunadamente el final acabó más triste para 'Chucho' que para 'Chava', hoy el fútbol mundial está de luto por la partida de un guerrero, un super futbolista, pero una mucho mejor persona, QEPD Christian Benítez.